¿Qué pasaría si más del 90% de bebés en el mundo fuera recibido de formas amorosas, naturales y respetuosas?

Con confianza, en la intimidad, con el apoyo de quienes saben cómo acompañarte, por su experiencia y a través de los conocimientos de madres y ancestras.

Durante mi embarazo, parto y puerperio, tomar decisiones independientemente de lo que el sistema indica, y hacer caso a mis necesidades, instintos, sentimientos y opiniones, fue todo un reto.

Un reto que me hizo entender la necesidad de una revolución, de una MATERNIDAD REVOLUCIONARIA. 


Después del maravilloso regalo de parir en casa, en confianza, con mi compañero de vida y mi hija mayor, con la fuerza de una tormenta y de un volcán dentro de mí (una sensación que estuvo presente durante muchos días), me pasa que cuando escucho algunas narraciones de partos “normales” de amigas, conocidas y desconocidas, me entra una mezcla de rabia y tristeza, porque lo que describen son escenas de tortura y maltrato, dignas de cualquier película de terror con sangre, sierras, batas blancas y pasillos de hospital.

Es por eso que decidí hacer un relato audiovisual basado en mi experiencia, un proyecto que surge de un videodiario que llevé durante mi segundo embarazo, parto y cuarentena, y que se ha ido transformando y creciendo cada vez más. Investigaciones, colaboraciones y vínculos empiezan a integrar una red de testimonios, propuestas de autogestión y análisis de temas relacionados con la posibilidad de ejercer una maternidad libre y consciente, lo cual hoy en día es un acto completamente revolucionario.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *